Los minerales utilizados para la fabricación artesanal de cada pieza son naturales, y algunos de ellos son sensibles al agua, exposición expesiva al sol, jabones y químicos.
La recomendación es evitar el contacto con dichas fuentes que podrían modificar y decolorar las piedras, y mantenerlas guardadas en la bolsita de tela, en un lugar libre de humedad.
Para su recarga energética, la mejor opción será a través de la luz lunar.
